La tuerca de eje floja es causa clave en el fallo del turbo

Si un vehículo tiene ruidos de traqueteo o chirrido y experimenta pérdida de potencia, la causa puede ser la tuerca de eje floja en el turbo.

En un turbo, la tuerca del eje, también conocida como ‘tuerca de bloqueo’ o ‘tuerca de bloqueo de la rueda compresora’, tiene un papel crítico manteniendo la rueda compresora y las piezas del rotor ajustadas en el eje. Para lograr un buen funcionamiento, la tuerca del eje debe apretarse siguiendo el procedimiento y ajustes correctos. Si hay alguna resistencia o bloqueo en el cartucho, la fuerza centrífuga continúa y la tuerca del eje se aflojará.

Una tuerca del eje floja puede producir daño catastrófico a la rueda compresora segundos después de iniciar la operación del turbo, dice José Mariño del CSA Melett Casty-Romer.

En la mayoría de los casos, una tuerca de eje floja no es la causa principal del fallo del turbo, y tener esto presente puede ayudar a identificar problemas y prevenir que se agraven, agrega Mariño.

La sobre-velocidad causa expansión radial excesiva de la rueda compresora y reduce su longitud, lo cual disminuye la tensión en el eje, y la tuerca del eje empieza a aflojarse.

El daño por objetos extraños en la rueda del compresor o de la turbina desbalancea el turbo y puede causar abrasión con la carcasa, aflojando la tuerca del eje.

Una obstrucción en la tubería de aceite puede hacer que el sistema de cojinetes ‘agarre’ al eje impidiendo que rote, causando el aflojamiento de la tuerca del eje. Adicionalmente, el desgaste o las rayaduras en cojinetes causadas por contaminación de aceite, permiten que la rueda compresora roce con la carcasa y se detenga, aflojando eventualmente la tuerca del eje.

También es importante anotar que en la mayoría de los turbos, la rosca de la tuerca del eje tiene sentido opuesto a la rotación del eje. Si la rueda del compresor gira en sentido horario, la tuerca del eje debe ser de rosca izquierda. De lo contrario, la tuerca puede aflojarse durante el funcionamiento.

En el centro de producción de turbos Melett en el Reino Unido,  el equipo de ensamblaje cumple estrictamente las directrices y procesos para que las tuercas de eje sean apretadas a las tolerancias correctas, según cada modelo de turbo a sus propias especificaciones de par de ajuste.

“Detectar las señales que indican la tuerca de eje floja puede ayudar a prevenir mayores daños y a reducir el riesgo de un fallo total del turbo”, dice Mariño.

Estas señales incluyen ruidos durante el funcionamiento del turbo como traqueteo o chirrido. Cuando se inspeccionan los álabes del compresor pueden mostrar astillado u otro daño si la tuerca del eje está floja y cae en el inducer de la rueda compresora. Los técnicos deben tener en cuenta la corrosión puntual alrededor de la entrada del compresor o en los álabes del compresor, recomienda Mariño.

“Es difícil prevenir el fallo del turbo debida a la tuerca de eje floja pero los síntomas claves pueden identificarse para prevenir que se agrave el problema. El primer paso para evitar el fallo del turbo causada por la tuerca de eje floja es mantener el motor el buenas condiciones y verificar que el turbo está instalado correctamente”.

“Es crítico identificar las causa fundamental de fallo del turbo porque puede llevar a fallo instantáneo de otro turbo recientemente instalado si las piezas incorrectas no son inspeccionadas y reemplazadas. También es buena práctica cambiar el aceite y el filtro de aceite al instalar un turbo, usando el grado especificado por el fabricante”, agrega Mariño.

Si hay sospecha de fallos en un turbo, la red Melett de reparadores especializados altamente calificados pueden ofrecer un servicio completo de inspección y diagnóstico que ayuda a identificar la causa fundamental del fallo y prevenir problemas posteriores.

Los CSAs Melett, localizados en toda España, están comprometidos a apoyar a los talleres independientes con reparaciones de turbos de la más alta calidad, usando piezas Melett con calidad OE.

Al trabajar con la red Melett de CSAs, los talleres pueden tener la seguridad de que sus consultas serán atendidas rápida y eficientemente por reparadores que tienen la experiencia técnica para dar una solución completa al turbocompresor.

 

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Gli effetti dei danni da corpi estranei sui turbocompressori

Se su un veicolo si avvertono rumori di tintinnio o sfregamento durante la guida e i conducenti percepiscono un calo di potenza del motore, questi fenomeni potrebbero essere dovuti a danni da corpo estraneo del turbocompressore.

Con “corpo estraneo” s’intende qualsiasi oggetto che entra nel turbocompressore, passando per gli ingressi di aria o scarico. Quando un corpo estraneo entra nel turbocompressore, ne risentiranno le sue prestazioni, comportando potenzialmente danni notevoli. Nicola Farimbella di G.R.R Motori, Centro di Assistenza Autorizzato Melett, illustra i diversi motivi che si celano dietro questo fenomeno e spiega i segni da ricercare e le metodologie per prevenirlo.

“Per i tecnici, è essenziale prestare particolare attenzione alle condizioni degli altri componenti all’interno del veicolo, al fine di attenuare i rischi posti per il turbocompressore,” afferma Nicola.

“Svariati sono gli scenari che possono contribuire alla presenza di sostanze contaminanti nella mandata di aria del turbocompressore, tutti con effetti devastanti sulla longevità dell’impianto. Questi includono precedenti guasti del turbocompressore che hanno lasciato residui nell’impianto, detriti dei componenti del motore oppure corpuscoli rimasti nelle prese di aria nel corso di un regolare intervento di riparazione.”

Tra le cause dell’ingresso di corpi estranei rientrano anche flessibili difettosi o danneggiati del turbo, con conseguente ingresso inavvertito di piccole particelle in qualsiasi traferro nell’impianto.

Uno specialista in materia di riparazione dei turbocompressori, come un CAA Melett, potrà diagnosticare i danni da corpo estraneo, se sono presenti segni visibili sulla girante del compressore o della turbina, oppure segni di corrosione intorno all’ingresso del compressore e alle lame del kit geometria variabile.

Se s’individuano danni in corrispondenza della girante di turbina o turbocompressore, è indispensabile interrompere immediatamente l’utilizzo del turbocompressore, in quanto ne risentirà il bilanciamento del rotore, con possibile impatto sulla sua vita utile.

“Al fine di prevenire il guasto del turbo dovuto a danni da corpo estraneo, raccomandiamo ai tecnici di sostituire oppure pulire completamente i condotti di alimentazione in ogni circostanza, nonché appurare l’assenza di detriti prima d’installare un turbo sostitutivo,” spiega Nicola. Tutti i canali dell’aria devono essere privi di sostanze contaminanti e ostruzioni. Inoltre, è necessario controllare regolarmente i flessibili come parte integrante della manutenzione di routine del turbocompressore.

“I tecnici devono sempre impiegare il filtro dell’aria corretto, idoneo per il modello veicolo specifico, e sostituirlo regolarmente in osservanza delle raccomandazioni del costruttore. Proprio come nel caso dei condotti di alimentazione e dei canali dell’aria, in seguito a un guasto del turbocompressore, il filtro e le prese circostanti devono essere puliti al fine di eliminare eventuali detriti o frammenti che potrebbero arrecare danni al nuovo turbocompressore,” spiega Nicola.

Se si sospettano anomalie del turbocompressore, la rete Melett di specialisti altamente qualificati in materia di riparazioni dei turbocompressori può offrire un’ispezione del turbo e un servizio di diagnosi completi, volti a individuare la causa alla radice del guasto e prevenire ulteriori anomalie.

Distribuiti su tutto il territorio italiano, i CAA Melett s’impegnano a sostenere le officine indipendenti con riparazioni dei turbo della qualità più elevata, avvalendosi di componenti di qualità OE Melett.

Collaborando con la rete di CAA Melett, le officine possono avere la certezza che qualsiasi richiesta sia gestita all’insegna della rapidità e dell’efficienza dagli specialisti in materia di riparazione che dispongono della perizia tecnica volta a fornire una soluzione completa per i turbocompressori.

 

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Los efectos de los daños causados a los turbocompresores por objetos extraños

Si un vehículo tiene ruidos de traqueteo o chirrido y experimenta pérdida de potencia, la causa puede ser puede daños por objeto extraño en el turbo.

Un objeto extraño es cualquier cosa que entra al turbo a través de la entrada de aire o las conexiones de escape. Cuando un objeto extraño entra en el turbocompresor, su funcionamiento quedará afectado, potencialmente con un daño considerable. María Rodríguez del CSA Melett Turbos y Equipos Diesel explica varias causas y describe las señales a tener en cuenta y la manera de prevenirlo.

“Es crítico que los técnicos presten atención especial a la condición de otros componentes del vehículo para mitigar los riesgos que enfrenta el turbo”, dice María.

“Hay varias causas que ocasionan contaminantes en el aire de entrada y todas ellas pueden tener efectos devastadores en la duración del sistema, incluyendo fallos previos que dejan remanentes en el sistema, desechos de componentes del motor o también objetos dejados durante el mantenimiento de rutina.”

Las causas de ingreso de objetos extraños también incluye fallo o daño en conductos del turbo que permiten inadvertidamente la entrada de partículas a través de pequeños espacios en el sistema.

Un reparador especialista, como un CSA Melett, podrá diagnosticar el daño por objeto extraño si hay marcas visibles en los álabes de compresor o turbina, o marcas de corrosión puntual alrededor de la entrada del compresor y en álabes de la geometría variable.

Al encontrar daño en álabes de turbina o compresor, pare la operación del turbo inmediatamente porque afectará el balance del rotor impactando su duración.

“Para prevenir fallos del turbo causados por objeto extraño, recomendamos que los técnicos reemplacen siempre o limpien completamente los conductos de entrada y verifiquen si hay desechos antes de reemplazar el turbo”, dice María. Todos los conductos de aire deben estar libres de contaminantes y obstrucciones. Los conductos deben ser revisados regularmente como parte del mantenimiento de rutina.

“Los técnicos deben usar siempre el filtro de aire correcto para el modelo específico de vehículo y reemplazarlo regularmente siguiendo las recomendaciones del fabricante. Así como con los conductos de entrada y de aire, después de un fallo del turbo, el filtro y los conductos contiguos deben limpiarse para eliminar cualquier desecho o fragmentos que puedan dañar el turbo nuevo”, dice María.

Si hay sospecha de fallos en un turbo, la red Melett de reparadores especializados altamente calificados pueden ofrecer un servicio completo de inspección y diagnóstico que ayuda a identificar la causa fundamental del fallo y prevenir problemas posteriores.

Los CSAs Melett, localizados en toda España, están comprometidos a apoyar a los talleres independientes con reparaciones de turbos de la más alta calidad, usando piezas Melett con calidad OE.

Al trabajar con la red Melett de CSAs, los talleres pueden tener la seguridad de que sus consultas serán atendidas rápida y eficientemente por reparadores que tienen la experiencia técnica para dar una solución completa al turbocompresor.

 

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Turbos PCK brinda asesoría: sobrecalentamiento del turbo

Si un vehículo no muestra potencia, el escape echa humo excesivamente o emite zumbidos anormales, la causa puede ser sobrecalentamiento del turbo. Carlos Pindado Espinilla del Centro de Servicio Autorizado Melett (CSA) Turbos PCK, explica los síntomas, causas y los pasos que los técnicos pueden seguir para prevenir la falla prematura del turbo.

“Si se sospecha de sobrecalentamiento del turbo, es crítico realizar una inspección exhaustiva porque puede causar dificultades serias en el futuro”, dice Carlos. “No es un proceso reversible y el fallo total puede prevenirse si los problemas se diagnostican y resuelven rápidamente.”

Los especialistas pueden determinar si un turbocompresor ha sido afectado por sobrecalentamiento realizando un examen detallado de los componentes internos.

“El calor residual al apagar el motor produce períodos de sobrecalentamiento y causa descoloración del eje de turbina y del cuerpo central, también de componentes internos como la arandela y el porta-segmento de empuje sin necesariamente mostrar otros síntomas de desgaste excesivo”, comenta Carlos.

Si no se resuelve el problema, puede producir fractura, torcimiento o daño de secciones de los álabes en la turbina del turbo. Además, el calor excesivo puede causar la carbonización del aceite lubricante que conduce a un fallo catastrófico del turbo.

Afortunadamente, prevenir el sobrecalentamiento que causa condiciones extremas de operación del turbo es relativamente sencillo.

“Los técnicos de vehículos deben verificar que no hay fugas en las líneas de enfriamiento, y que en vehículos diésel el filtro de partículas no está obstruido. Los conductores también pueden contribuir a la duración del turbo de su coche permitiendo que el turbo tenga tiempo de enfriarse después de largas jornadas”, dice Carlos.

Si hay sospecha de fallos en un turbo, la red Melett de reparadores especializados altamente calificados pueden ofrecer un servicio completo de inspección y diagnóstico que ayuda a identificar la causa fundamental del fallo y prevenir problemas posteriores.

Los Centros de Servicio autorizado Melett (CSAs) localizados en toda España están comprometidos a apoyar a los talleres independientes con reparaciones de turbos de la más alta calidad, usando piezas Melett con calidad de fabricante original (OE).

Al trabajar con la red Melett de CSAs, los talleres pueden tener la seguridad de que sus consultas serán atendidas rápida y eficientemente por reparadores que tienen la experiencia técnica para dar una solución completa al turbocompresor.

Para mayor información sobre los productos de Melett y su red de CSAs, visite:

Centros de Servicio Autorizados – España

Dei consigli sul surriscaldamento del turbocompressore

Se un veicolo risente della mancanza di potenza, lo scarico emette una quantità eccessiva di fumo, oppure vi sono dei singhiozzi anomali, tutte queste circostanze sono riconducibili al possibile surriscaldamento del turbocompressore. Roberto Gabriele di RCM 2000 SRL, Centro di Assistenza Autorizzato (CAA) Melett, illustra i sintomi, le cause e i passaggi che possono essere intrapresi dai tecnici dei veicoli per prevenire il guasto immediato del turbocompressore.

“Se si sospetta il surriscaldamento del turbocompressore, è essenziale eseguire un’ispezione approfondita, in quanto potrebbe causare anomalie gravi nel lungo termine,” afferma Roberto. “Non trattandosi di un processo reversibile, il guasto totale può essere evitato diagnosticando e risolvendo rapidamente i problemi.”

Gli specialisti dei turbocompressori possono stabilire se il surriscaldamento ha influito sul turbocompressore, conducendo un esame dettagliato dei componenti interni.

“Lo shock termico subito nel corso di lunghi periodi di surriscaldamento provoca lo scolorimento della girante turbina e del corpo centrale, nonché dei componenti interni, come la rondella di spinta e il collare port’anello, senza necessariamente mostrare altri sintomi di usura eccessiva,” spiega Roberto.

Se il problema non viene risolto, queste circostanze fanno sì che sezioni delle lame turbina del turbocompressore mostrino segni di frattura, deformazione o danni. Inoltre, il calore eccessivo può causare la carbonizzazione dell’olio di lubrificazione, con conseguente guasto catastrofico del turbocompressore.

Fortunatamente, la prevenzione delle condizioni di surriscaldamento e della sollecitazione del turbocompressore che ne risulta è un’attività relativamente immediata.

“I tecnici dei veicoli devono verificare che non vi siano perdite nelle tubature di raffreddamento e, sui veicoli a diesel, che non sia ostruito il DPF. Anche gli automobilisti possono contribuire alla longevità del turbocompressore dell’auto, concedendogli del tempo per raffreddarsi in seguito a lunghi tragitti,” spiega Roberto.

Se si sospetta un’anomalia del turbocompressore, la rete Melett di specialisti altamente qualificati in materia di riparazioni dei turbocompressori può offrire un’ispezione del turbo e un servizio di diagnosi completi, volti a individuare la causa alla radice del guasto e prevenire ulteriori anomalie.

Distribuiti su tutto il territorio italiano, i Centri di Assistenza Autorizzati (CAA) Melett s’impegnano a sostenere le officine indipendenti con riparazioni dei turbo della qualità più elevata, avvalendosi di componenti di qualità OE Melett.

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